viernes, 18 de noviembre de 2011

El cono del aprendizaje

La lectura

LECTURA: ¿OBLIGACIÓN O PLACER?

El gusto por la lectura no es algo innato, sino que constituye un proceso de aprendizaje que se inicia en la infancia. Los padres pueden motivar esta afición en sus hijos. Ofrecer unos correctos patrones de conducta y poner a su alcance los libros adecuados son tareas imprescindibles para lograrlo.


DE 0 A 3 AÑOS Esta etapa es decisiva en el gusto que desarrollará el niño por la lectura. Según cómo hayan establecido los padres la relación “libro–juego”, la afición se desarrollará de una manera u otra.

¿Cómo motivarle?. Aunque el niño todavía no sabe leer, es importante empezar a ver con él libros con imágenes y colores y ayudarle a reconocer objetos y animales en ellos. Es fundamental que asocie el libro con juego y diversión. También es beneficioso empezar a contarle cuentos muy cortos. Además de ampliar su vocabulario, le enseñan a dar una significación secuencial a las imágenes que ve.

DE 3 A 6 AÑOS En esta etapa la fantasía resume la visión que tiene el niño del mundo. Debido a esto, se deben proporcionar al niño cuentos y relatos fantásticos, ya que alimentan su imaginación y le permiten crecer, pero siempre teniendo en cuenta lo que puede asimilar el niño en cada momento.

¿Cómo motivarle?. El niño todavía no sabe leer pero debe tener claro que cuando sepa hacerlo podrá divertirse tanto como lo hace escuchando cuentos. Si no se crea esta asociación cuanto antes, es posible que al crecer el niño por falta de uso de la imaginación llegue a perder el interés por el mundo de la literatura. Para motivar a los niños, los padres deben jugar con ellos, contarles cuentos, escuchar los que cuentan ellos, introducirse en su mundo de fantasía...

DE 7 A 12 AÑOS En esta etapa se consolida el aprendizaje de la lectura. Se trata de una tarea difícil, por lo que el niño debe estar lo suficientemente motivado como para no considerarlo como algo costoso y aburrido.

¿Cómo motivarle?. Cuando se está aprendiendo a leer, la mejor motivación es ver que los demás leen. Comprarle libros adecuados a su edad que sean estimulantes y divertidos y que estén en su cuarto, al alcance de su mano también favorecerá este hábito. Es bueno proponer al niño leer juntos, dedicar ratos a la lectura y luego comentar lo leído, es necesario comprobar que comprende lo que lee, sobre todo en los inicios del aprendizaje.

Animarles a que cuenten lo leído a sus hermanos en la cena, les hará sentirse importantes, y de esta manera el niño perfeccionará su expresión oral, utilizará vocabulario nuevo y establecerá secuencias para contar el cuento paso a paso.

Otra forma divertida de motivar y estimular la creatividad es representar teatralmente el cuento con sus hermanos o amigos. Con esto se consigue que se afiance la relación cuento–juego y que la comprensión y asimilación de lo leído sea mayor.

DE 12 A 15 AÑOS En esta etapa se desarrolla el espíritu crítico, es conveniente tratar de que comience a ser consciente de que en un libro no sólo interesa el argumento sino también el punto de vista del autor, cómo está escrito el libro, algunos matices...

¿Cómo motivarle?. Si el niño tiene adquiridos unos buenos hábitos de lectura, los padres deben procurar proporcionarle buenos libros e intentar que no pierda la costumbre. En el caso de que no le guste leer, una forma de motivarle es ir buscando dentro de sus aficiones y gustos, libros que amplíen sus conocimientos sobre un tema atractivo para él.

Los padres pueden leer primero el libro, y comentárselo a su hijo para despertar su curiosidad. Puede resultar interesante que una vez leído se comente en la familia, que los padres se interesen por la opinión de su hijo, que le ayuden a desarrollar su juicio crítico y a afianzar su hábito lector.

ADOLESCENCIA En esta etapa se da la crisis de la adolescencia, en la que se busca una identidad y autonomía personal todavía no conseguida. El adolescente se está buscando a sí mismo y para ello busca modelos con los que identificarse, de los que aprender.

El problema que se plantea con los adolescentes es que se consideran ya “mayores” para leer todo, los padres tienen que crear la noción de que la madurez va unida al espíritu crítico y para demostrarlo, lo mejor es hacerlo con el ejemplo.

¿Cómo motivarle?. Es fundamental hacerles pensar, discutir con ellos sobre lo que leen, crear polémica, no ridiculizar sus opiniones ni gustos y comprar libros de su interés con ellos.

Recomendaciones en la escuela para niños disléxicos

 ¿ Qué recomendaciones en la escuela son útiles para el niño disléxico?

Es imprescindible que todo niño disléxico reciba un tratamiento especifico. Pero es crucial que al mismo tiempo se atienda en el aula su problema.
La atención escolar se debe basar primordialmente en la comprensión del trastorno. Se debe huir tanto de medidas sobreprotectoras, como de actitudes no basadas en el hecho de que la dislexia es un trastorno biológico. Por tanto debe quedar muy claro que el problema no viene condicionado por una falta de motivación o pereza.
También seria una interpretación  errónea atribuir las dificultades del disléxico a un nivel bajo de inteligencia.
Se recomiendan una serie de normas que deberán individualizarse para cada caso. Con ello se pretende optimizar el rendimiento, al tiempo que se intenta evitar problemas de frustración y perdida de autoestima, muy frecuentes entre los niños disléxicos.
Estas recomendaciones son las siguientes:
 
·  Dar a entender al alumno que se conoce el problema y que se hará todo lo posible para prestarle ayuda.

·  Hacerle sentar en las primeras filas, cerca del profesor, para prestarle la mejor ayuda.

·  Se le debe ayudar a pronunciar correctamente las palabras

·  No utilizar el método "global", para el aprendizaje de la lectura.

·  No se debe pretender que alcance un nivel lector igual al de los otros niños.

·  Prestarle una atención especial y animarle a preguntar cuando tenga alguna duda.

·  Se debe comprobar siempre que ha entendido el material escrito recibido.

·  Se debe comprobar que el material que se le ofrece para leer es apropiado para su nivel lector.

·  Se deben valorar los trabajos por su contenido, no por los errores de escritura.

·  Siempre que sea posible se deben realizar las valoraciones oralmente.

·  Se debe recordar que requiere más tiempo que los demás para terminar sus tareas.

·  Se deben tratar de destacar los aspectos positivos en su trabajo.

·  Se debe evitar que tenga que leer en publico.

·  Se deben valorar los progresos de acuerdo con su esfuerzo, no con el nivel del resto de la clase.

·  Se le debe permitir, si le resulta útil, el uso de la calculadora y  grabaciones.

·  Se le deber permitir el uso de medios informáticos y el uso de correctores ortográficos.

·  Se le debe enseñar a tomar apuntes mediante notas breves, que sinteticen el contenido de una explicación.

·  Se le deben poner menos deberes de lectura y escritura.

·  Siempre que sea posible no se le deben hacer copiar grandes "parrafadas" de la pizarra si es posible darle una fotocopia.

·  No se le debe ridiculizar nunca.

·  En una prueba escrita no se le deben corregir todos los errores de escritura.

·  No se el debe hacer  repetir un trabajo escrito por el echo de haberlo hecho mal.

·  Se debe aceptar que se distraiga con mayor facilidad que los demás, puesto que la lectura le comporta un sobreesfuerzo.

·  Debe ser tomado en consideración que escuchar y escribir simultáneamente puede resultar muy difícil.

Técnica del "aislamiento": Tiempo fuera

TÉCNICA DEL AISLAMIENTO
(TIME-OUT)

El aislamiento, como modelo especial de castigo, es una técnica muy utilizada para eliminar una conducta problemática y consiste en separar al niño del contexto en el que está ocurriendo la conducta anómala. Dicha separación o aislamiento debe conllevar una privación social. Por ejemplo: separar a un alumno del resto de compañeros de la clase cuando su comportamiento sea inaceptable y no se pueda ignorar por la gravedad del mismo.

El aislamiento recibe también el nombre de tiempo-fuera (time-out) o receso de refuerzo y uno de los principales problemas que plantea es el de la elección del lugar de aislamiento social (pasillo, patio...). El nuevo contexto en donde se retire al alumno durante un tiempo aproximado de 5 minutos o hasta que cese la conducta anómala, debe ser un lugar en el que no pueda obtener ninguna gratificación o refuerzo porque, de lo contrario, el lugar de aislamiento sería una consecuencia agradable de molestar en clase con lo que se estaría reforzando a esta última.

No sería efectivo la aplicación del tiempo-fuera en un alumno al que se le aisla en el patio y allí tiene la oportunidad de practicar su deporte favorito durante el periodo de tiempo que dura su separación del resto de la clase. Es muy conveniente conseguir la colaboración de otros profesores del Equipo Docente que en esos momentos no den clase o que realicen alguna tarea que pueda ser compatible con la "custodia" del alumno perturbador.

Algunos niños manifiestan comportamientos inadecuados en la clase, especialmente los agresivos. La mayoría de las veces estas conductas alborotadoras son de muy difícil control y resulta poco menos que imposible que el profesor las pueda ignorar produciendo a la vez respuestas emocionales tanto en el propio profesor como en los alumnos. En este caso, el aislamiento consistiría en separar al alumno del resto de compañeros de su clase hasta que cesase en su alboroto para, posteriormente, volverlo a incorporar a la clase.

Pero podría darse el caso de que la "salida" o aislamiento funcionara como reforzador de su conducta alborotadora porque al niño en cuestión no le gusta estar en la clase realizando la tarea escolar. En estos casos habría que determinar cuáles son las actividades reforzantes o situaciones gratificantes para el alumno a efectos de poderlas utilizar contingentemente al aplicar el tiempo-fuera, en el sentido de privación o separación del contexto reforzante.

Para que el aislamiento sea efectivo el alumno ha de experimentar verdadero
aburrimiento de modo tal que prefiera estar en la clase a estar aislado, de lo contrario se le estaría reforzando. Si el niño es aislado en el pasillo, encontrar a otros compañeros para contarles su "aventura" resultará reforzante para él. Generalmente los pasillos son desaconsejables porque existen multitud de elementos distractores que no benefician en absoluto la eficacia de la técnica aplicada por lo que sería recomendable el aislamiento en un lugar apartado de la clase o en alguna dependencia donde pueda estar sometido a control, sin peligros y no poder obtener refuerzo alguno ni por parte de sus compañeros ni por la existencia de estímulos gratificantes en el lugar del aislamiento.

Algunas veces suele ocurrir que el alumno entabla un enfrentamiento verbal con el profesor, discusión que debería ser evitada a toda costa y no debería producir alteración emocional en el docente. El alumno ha de conocer previamente cuál va a ser la consecuencia de su conducta sin la necesidad de tener que producirse discusiones acerca del porqué del tiempo-fuera. El tiempo-fuera debe complementarse con otras técnicas de refuerzo para aumentar las conductas contrarias a las que se pretende eliminar.


CONCLUSIONES DE LA EFICACIA DE LA TÉCNICA DEL AISLAMIENTO:

- La técnica del time-out suele ser más eficaz que la ignorancia pasiva de la conducta-problema.

- No es aconsejable un periodo de tiempo-fuera de más de 20 minutos. Los periodos de tiempo más cortos están más indicados.

- Debe asegurarse la correcta dinámica entre salir de clase, permanecer en el lugar de aislamiento y volver a entrar a la clase de tal modo que el funcionamiento no quede a la improvisación y al descontrol de los estímulos que pudieran entorpecer el correcto aislamiento temporal del alumno.

- Si la conducta-problema aumenta al indicársele al alumno que debe permanecer cinco minutos fuera de clase, debe aplicársele un castigo moderado de uno o dos minutos en función de la persistencia del problema. Por ejemplo: si al darle instrucciones al alumno de que se retire porque está dando gritos que perturban el orden de la clase continúa en sus gritos, deberá decírsele que se aumentan en unos minutos más su tiempo de aislamiento por el hecho de persistir en su conducta perturbadora.

- Esta técnica ofrece mayor ventaja que el castigo puesto que no se le ofrece al alumno un modelo negativo de agresión para que pueda constituir una fuente de imitación tal y como suele ocurrir en la aplicación del castigo.

- Si se pone en práctica la técnica del tiempo-fuera o aislamiento para la modificación de conductas altamente disruptivas resulta necesario involucrar a los padres para que sigan las mismas pautas en el contexto familiar.

El juego de portarse bien

EL JUEGO DE PORTARSE BIEN

Este juego está basado en las Técnicas de Modificación de Conducta y su objetivo es modificar el comportamiento disruptivo de toda la clase.

* El profesor explica a los alumnos que, después de la clase de lenguaje (o de matemáticas, o de social, etc.) van a hacer un juego, al cual, si funciona, se podrá jugar todos los días en las horas que señale el profesor.

* Se forman dos equipos (hacer la división por filas o grupos de mesas).

* Los dos equipos pueden ganar en el juego y por ello pueden obtener ciertos privilegios que después se señalarán.

* Establecer las reglas del juego para que los alumnos las conozcan bien y queden reflejadas en un mural confeccionado al efecto y colgado en la pared.


REGLAS:
A) PARA LEVANTARSE DEL ASIENTO SE DEBE PEDIR PERMISO AL PROFESOR (LEVANTAR LA MANO Y ESPERAR CONTESTACIÓN DEL PROFESOR).

B) CADA UNO OCUPA SU PROPIA SILLA Y NO LA DEL COMPAÑERO.

C) NADIE PUEDE ABANDONAR SU ASIENTO PARA HABLAR CON SU COMPAÑERO NI HACERLO (HABLAR) A DISTANCIA.

D) PARA IR AL BAÑO, LA PAPELERA, A OTRO LUGAR DE LA CLASE, ES NECESARIO PEDIR PERMISO (LEVANTANDO LA MANO) AL PROFESOR.

E) ES NECESARIO PEDIR PERMISO PARA HABLAR.

F) MIENTRAS SE ESTÁ PIDIENDO PERMISO NO SE PUEDE HABLAR. EL ALUMNO ESPERARÁ A QUE EL PROFESOR SE LO CONCEDA.

G) NO SE HACEN RUIDOS.

CONSECUENCIAS:
a) Cuando uno de los equipos incumpla alguna de las normas se anota una marca (X) en su correspondiente casillero que figura en el mural.

b) Al final de la mañana se determina el equipo ganador del día.

c) El equipo ganador es el que menos marcas (X) tenga en su casillero.

d) A cada uno de los miembros del equipo ganador se le entrega un distintivo o pegatina que lo acredita como tal. Los distintivos se recogen al final de la jornada.

e) El equipo ganador obtiene:
- Diez minutos de tiempo libre en el patio de recreo en el mismo día o al día siguiente.
- Diez minutos de tiempo libre en la clase (actividades libres)
- Otros...

f) El equipo perdedor no obtiene ningún beneficio y permanece cinco minutos más realizando tareas antes de salir al recreo.

g) Si el equipo perdedor ha recibido menos número de marcas en una semana puede también obtener:
- Cinco minutos de tiempo libre en el patio de recreo (los viernes)
- Cinco minutos de tiempo libre en la clase (actividades libres)
- Otros...

El registro de marcas se realiza en un mural que contiene las siguientes casillas:

 Lunes
Martes
Miércoles
Jueves
Viernes
Equipo nº 1




Equipo nº 2





EQUIPO Nº 1. Componentes:
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
EQUIPO Nº 2. Componentes:
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------


Algunos principios metodológicos para flexibilizar el juego y adaptarlo a las características de la clase son:
- No se debe permitir el cambio de grupo salvo en aquellos casos en los que por necesidades especiales deba hacerse.

- El distintivo o pegatina de ganadores (uno por cada alumno) debe tener cierta relevancia estética (estrellas coloreadas, fichas-chapas con inscripción, etc).

- La concesión de los distintivos de equipo ganador debe realizarse al principio de la puesta en funcionamiento del juego, al final del día. Posteriormente cada dos días, cada tres, cada semana. Esto debe hacerse siempre en función de la eficacia que se vaya logrando.

- Las consecuencias positivas y negativas a obtener deben ser negociadas con los alumnos, salvo en el caso de los alumnos más pequeños que tengan dificultades para seleccionar sus consecuencias tanto positivas como negativas.

- El número de marcas máximas exigidas al equipo perdedor para obtener ciertos privilegios establecidos debe ser flexible. Se trata de premiar también su comportamiento grupal adecuado.

- El juego se pondrá en práctica durante media hora al día (este periodo puede ser variable). Sólo se registran cruces o marcas durante dicho tiempo y no durante el resto de la jornada escolar en que no está vigente el juego.

- Durante el tiempo del "juego" los alumnos permanecen realizando tareas.

- Para lograr una mayor motivación hacia el juego se les puede proporcionar a los alumnos una tarea escolar novedosa: reconocimiento de diferencias en ilustraciones, seguir series lógicas, localizar palabras en los libros. Es decir, tareas que estando vinculadas con los objetivos referenciales del área sean distintas y novedosas con respecto a las realizadas normalmente en la clase.

- El objetivo principal de la realización del juego durante periodos determinados de tiempo es conseguir que los efectos benéficos que se van logrando (descenso del nivel de disruptividad), se generalicen al resto de actividades de la jornada escolar.

- Se debe variar el tiempo dedicado al juego a criterio del profesor (en la primera hora, en la segunda, después del recreo, etc).

- Implementar el juego en aquellos periodos de tiempo en que el comportamiento disruptivo sea más notorio.

Las reglas de clase

LAS REGLAS DE CLASE


El programa que se presenta a continuación constituye una conjunción armonizada de técnicas de refuerzo y de extinción (técnicas de modificación de conducta) y está formado por las siguientes fases:

A) INSTRUCCIONES
B) MOMENTOS ÓPTIMOS DE REPASO
C) TÉCNICAS: IGNORAR Y ALABAR.
D) TIPOS DE CONDUCTAS INADECUADAS E INCOMPATIBLES
E) COMENTARIOS REFORZANTES

La aplicación de este programa ha de tener un carácter de sistematicidad dotándolo de la entidad curricular que las condiciones contextuales posibiliten. Se podría decir que a mayor tratamiento normalizado mayor es el rendimiento obtenido y en nuestro caso el rendimiento sería la obtención de eficacia conductual. El tratamiento normalizado consistiría en programar, organizar, evaluar, etc.

A) INSTRUCCIONES
Colocar en un lugar bien visible de la clase las NORMAS DE CONDUCTA que se deben observar en el aula. Deben tener las siguientes características:
1. Reglas cortas y concretas.
2. Cinco o seis reglas es lo adecuado.
3. Construir las reglas de manera positiva, a ser posible no utilizar el "NO".
4. Leer colectivamente (profesor y alumnos) las reglas unas 4-6 veces al día.
5. Recuerde las reglas a los alumnos en otros momentos que sean, a ser posible, cuando se porten bien. No recordarlas cuando alguien se comporte inadecuadamente.

NORMAS DE CONDUCTA DE LA CLASE
1. PERMANECER SENTADOS MIENTRAS SE TRABAJA.
2. LEVANTO LA MANO PARA PEDIR ALGO AL PROFESOR.
3. CUANDO EL PROFESOR NO ESTÁ, GUARDO SILENCIO.
4. REALIZO LA TAREA SIN MOLESTAR AL COMPAÑERO.
5. SI NECESITO HABLAR LO HAGO EN VOZ BAJA.


B) MOMENTOS ÓPTIMOS PARA REPASAR LAS NORMAS DE CONDUCTA
Estos momentos pueden ser:
- A la entrada, por la mañana.
- A media mañana
- En parte del horario de una materia concreta, turnándose el profesorado para que todos se involucren en la tarea común.
- En la hora de Tutoría.


C) TÉCNICAS

IGNORAR LA CONDUCTA INADECUADA
No se le debe prestar atención a las conductas inadecuadas que interfieren con el aprendizaje o la enseñanza, a menos que, por supuesto, un niño lastime a otro, en cuyo caso hay que usar un castigo que parezca adecuado a la acción; es preferible la retirada de algo que sea reforzante para él.
El aprender a ignorar es bastante difícil. La mayor parte de nosotros presta atención a las transgresiones; por ejemplo, muchas veces en vez de ignorar decimos cosas como las siguientes: "María, estate quieta", "José, ya está bien de molestar", "Vicente, deja de andar y trabaja".
Las conductas que se deben ignorar comprenden conductas motoras tales como: dejar su asiento, correr, andar, mover sillas, etc. También debe ignorarse cualquier comentario verbal que no esté relacionado con la tarea como conversar con otros niños cuando no está permitido, decir el nombre del maestro para llamar la atención, ruidos extraños, reir, etc.
Debe ignorarse cualquier ruido que haga con los lápices, objetos, así como molestar a otro compañero.

ALABAR LA CONDUCTA ADECUADA
Se suele tener tendencia a dar por supuesta la conducta adecuada y a prestar atención solamente cuando un niño actúa o se porta mal. La aplicación de esta técnica supone lo contrario, es decir: sorprender al niño cuando se porta bien, y hacer un comentario adecuado para recompensarlo por su buena conducta aunque sólo sea un ligero inicio de esa buena conducta deseada.
1. ALABE, PRESTE ATENCIÓN O SONRÍA CUANDO EL NIÑO ESTÉ HACIENDO LO QUE SE ESPERA QUE HAGA.
2. MOLDEE LA CONDUCTA DESEADA MEDIANTE EL REFUERZO DE PEQUEÑOS PASOS CONSEGUIDOS (prestando atención a los pequeños avances de la conducta que se desea).
3. ALABE LAS CONDUCTAS POR SEGUIR LAS REGLAS DE LA CLASE, LAS CONDUCTAS PROSOCIALES Y TODAS AQUELLAS CONDUCTAS QUE SE PROPONGA ESTABLECER EN EL AULA.
Ejemplo: "alabar por":
- Centrarse en el trabajo individual
- Levantar la mano
- Estar en silencio
- Prestar atención y seguir las instrucciones.
- Estar tranquilo y callado.

Trate de que sus comentarios reforzantes sean lo más variados posibles. Al principio probablemente tenga la sensación de que alaba demasiado y de que eso suena un poco falso para Vd.. Esta es una reacción típica y se vuelve natural con el paso del tiempo.
Si los comentarios interfieren la tarea de clase, entonces utilice gestos, sonrisas, es decir, atención facial para alabar la conducta adecuada.
Camine por la clase y sorprenda a los alumnos que cumplen las conductas adecuadas, póngales la mano en la espalda y refuércelos. Se ha comprobado que la alabanza que se dice a un niño con tranquilidad es eficaz si se combina con algún signo físico de aprobación.

REGLA GENERAL:
ALABE Y PRESTE ATENCIÓN A LAS CONDUCTAS QUE FACILITEN EL APRENDIZAJE. DIGA AL NIÑO POR QUÉ SE LE ALABA. TRATE DE REFORZAR CONDUCTAS INCOMPATIBLES CON LAS QUE DESEA HACER DISMINUIR.


D) TIPOS DE CONDUCTAS EN LA CLASE


CONDUCTAS INADECUADAS:
IGNORAR
CONDUCTAS INCOMPATIBLES:
REFORZAR
1. CorrerEstar sentado
2. HablarEstar callado
3. AgresividadConductas colaboracionistas (ayudas, trabajos conjuntos, diálogo, etc.)
4. HiperactividadPermanecer tranquilo realizando la tarea.
5. TimidezCualquier inicio de expresión de sus sentimientos, diálogo, interacción, reunión, etc.
6. InatenciónTrabajos minuciosos, detallistas del gusto del alumno, trabajos manuales, juegos.
7. OtrasAnalizarlas y encontrar las conductas que imposibiliten au realización para reforzarlas.



E) EJEMPLOS DE COMENTARIOS REFORZANTES
- Me gusta que trabajes tan tranquilamente.
- Lo haces muy bien.
- Eso sí que es un buen trabajo.
- Te has ganado...
- Me gusta verte trabajar de este modo.
- Tu trabajo es cada vez más limpio.
- Estás aprendiendo bien.
- Has mejorado mucho.
- Tu conducta es la adecuada.
- Conoces bien las reglas.
- Lo has conseguido.
- Has aumentado tu rendimiento.
   


Orientaciones para actuar con niños violentos

ORIENTACIONES PARA ACTUAR CON NIÑOS VIOLENTOS

Se ofrecen a continuación unas recomendaciones generales sobre el manejo de la conducta
violenta que presentan algunos niños. Estas guías pueden ser útiles para padres, maestros y
otros adultos que tengan que relacionarse con niños con esta característica.

ESTABLECER LAS REGLAS
Es fundamental establecer las reglas de conducta de una forma clara, específica y concreta. Si
no se establecen los límites de la conducta y no se define lo que se puede y lo que no se
puede hacer, mal se ha de esperar que el niño se someta a un modelo determinado de
comportamiento.
Hay padres que olvidan que sus hijos, a igual que ellos y que todo ser humano, nacieron sin
noción alguna de cómo han de comportarse. Por lo tanto, desconocen la diferencia entre lo
permisible y lo inadmisible, entre lo obligatorio y lo optativo, entre lo elogiable y lo punible. Una
parte esencial de la misión de padres y madres es enseñar a los hijos las normas que rigen el
comportamiento. El conocimiento de las "reglas del juego" les puede permitir a estos
desenvolverse adecuadamente en los ambientes y situaciones por los que tengan que pasar a
lo largo de sus vidas.
Los niños con tendencia a reaccionar violentamente ante las contrariedades necesitan aún más
que otros conocer lo que se espera de ellos y cómo han de comportarse. El primer paso que
hay que dar para tratar de modificar su conducta es establecer tan claramente como sea
posible las reglas de conducta que deben seguir. Y se les deben repetir todas las veces que
sea necesario, especialmente cuando se les reprende por haber transgredido alguna de ellas.

RESPETO Y CALMA
Cuando nos dirijamos a un niño con problema de conducta violenta, es necesario hablarle con
respeto. Respeto por su condición de persona y su dignidad humana.¿Cómo se le puede exigir
respeto a quien no se está tratando con respeto? Se le ha de señalar la falta cometida, pero sin
ofenderlo o humillarlo. Hablarle de esta forma no sólo allana el camino para que tome
conciencia de la falta que ha cometido, sino que le provee un modelo de conducta aceptable.
O sea, al rehuir nuestra propia violencia, le estamos presentando la forma de comportamiento
que le resulta extraña y que tanta dificultad le cuesta adoptar.
Hablar con respeto implica hablar con calma. Una de las mayores dificultades que tienen una
buena cantidad de adultos para manejar situaciones conflictivas con niños opositores y
violentos es controlar su propio coraje. Por fácil o difícil de lograr que sea esto, es una realidad
que la comunicación requiere de calma y autocontrol. Y la calma excluye el coraje. Por otra
parte, el adulto que se dirige con coraje a un niño que se ha comportado con agresividad, le
está prohibiendo que actúe como él se está permitiendo la licencia de actuar. Incongruente e
ilógico, ¿verdad?

EVITAR CONFRONTACIONES
Es altamente recomendable hacer todo lo posible por evitar tener confrontaciones con niños
violentos. La confrontación equivale en estos casos a una pelea segura, que es el terreno que
se debe evitar a toda costa. En la pelea se desata el coraje sin límite y se facilitan la ofensa y
el insulto. En la pelea tiene grandes probabilidades de darse todo lo que nunca debería
producirse. Además, quien pelea con estos niños se está poniendo a su misma altura y está
incurriendo en el mismo error que quisiera erradicar del niño.

RESALTAR LOS LOGROS Y EXITOS
En términos generales y válidos para todas las personas con que nos relacionemos, es
preferible hacer mención de sus logros, habilidades y cualidades positivas, antes que exponer
sus debilidades y deficiencias. Cuando hacemos esto último, solemos caer muy fácilmente en
la acusación y acusar no conduce nunca a desenlaces positivos ni ayuda a solucionar los
problemas que tenemos entre manos.
Si bien lo anterior se aplica a todas las relaciones, es un factor importante a tener en cuenta en
el caso de los niños con propensión a la violencia. Estos niños sufren trastornos emocionales y
cognitivos que les dificultan manejar adecuadamente la frustración. Enfrentarlos a acusaciones
no les ayuda a superar estos trastornos y suele tener el efecto de enconar su resentimiento y
provocar sus explosiones emocionales. Si se les mencionan sus fortalezas y cualidades
positivas, se les está ayudando a revalorizarse como seres humanos.
La utilidad de estas guías generales, que pueden ampliarse mucho más, no se limita al mundo
infantil. Pueden aplicarse fructuosamente también en nuestras relaciones con los adultos con
tendencia a las reacciones violentas, que, por cierto, no escasean.

El reglamento familiar


EL REGLAMENTO FAMILIAR


Consideraciones para crear un ambiente familiar estable, consistente, explícito y predecible

  • ESTABLE: el cumplimiento – incumplimiento de las reglas siempre ha de tener las mismas consecuencias
  • CONSISTENTE: las reglas no cambian de un día para otro
  • EXPLÍCITO: las reglas son conocidas y comprendidas
  • PREDECIBLE: las reglas están definidas antes de que se interrumpan

ELABORACIÓN


  • Hacer una lista de las conductas inadecuadas de el/la niño/a
  • Transformar la lista en otra de “objetivos positivos”
  • Formular esos objetivos en forma de “reglas de conducta”: deben ser claras y concretas

APLICACIÓN


  • Proponer cada semana “cinco reglas de conducta”, destacando una como la más importante
  • Cada regla debe realizarse bien durante al menos 15 días seguidos
  • Conseguido este objetivo, se propone la conducta siguiente, según el orden de importancia
  • La conducta que se da por “conseguida” deja de premiarse o sancionarse
  • Los padres deben estar de acuerdo tanto en el reglamento como en las consecuencias por el cumplimiento o incumplimiento de los objetivos


EJEMPLO DE LISTA DE CONDUCTAS INADECUADAS



  • No se hace la cama
  • Se olvida de los libros en el colegio
  • Deja el pijama tirado en el suelo
  • Deja su cazadora en cualquier sitio
  • No quiere ducharse por las noches
  • No quiere lavarse por las mañanas
  • Su habitación está siempre desordenada
  • Hace rabiar a su hermano/a
  • Se pone a llorar en cuanto se le niega algo


EJEMPLO DE LISTA DE OBJETIVOS POSITIVOS


  • Hacer su cama los sábados y domingos
  • Traer del colegio los libros necesarios para los deberes
  • Dejar el pijama doblado bajo la almohada
  • Dejar la cazadora colgada en la percha
  • Ducharse antes de acostarse
  • Lavarse cara y manos antes de desayunar
  • Dejar la ropa sucia en la lavadora
  • Guardar la ropa limpia en el armario
  • Dejar los libros y juguetes en la estantería
  • Responder con palabras amables a su hermano/a
  • Aceptar las negativas sin enfadarse


EJEMPLO DE LA JERARQUÍA DE OBJETIVOS


  • Colgar la cazadora en una percha
  • Ducharse por la noche antes de acostarse
  • Lavarse cara y manos antes de desayunar
  • Dejar la ropa sucia en la lavadora
  • Guardar la ropa limpia en el armario
  • Traer del colegio los libros necesarios para los deberes
  • Aceptar las negativas sin enfadarse
  • Responder con palabras amables a su hermano/a
  • Dejar los libros y juguetes en la estantería
  • Colocar el pijama doblado bajo la almohada
  • Hacer su cama sábados y domingos


EJEMPLO DE REGLAS DE CONDUCTA


  • Colgar la cazadora en una percha
  • Ducharse por la noche antes de acostarse
  • Lavarse cara y manos antes de desayunar
  • Dejar la ropa sucia en la lavadora
  • Guardar la ropa limpia en el armario
  • Traer del colegio los libros necesarios para los deberes
  • Aceptar las negativas sin enfadarse
  • Responder con palabras amables a su hermano/a
  • Dejar los libros y juguetes en la estantería
  • Colocar el pijama doblado bajo la almohada
  • Hacer su cama sábados y domingos




AUTOINSTRUCCIONES: enseñar al/la niño/a a controlar su propia conducta



  • Objetivos: mejorar la atención, reducir la conducta impulsiva y regular la actividad y las respuestas emocionales
  • Se usan en las situaciones de trabajo y también en las reglas de juego
  • Los padres actúan como modelos de conducta de el/la hijo/a
  • Participan y “demuestran” al/la niño/a la forma correcta de ejecutar una tarea, en lugar de planificarla y usar instrucciones
  • Se presentan como un modelo que comete algún error y utiliza estrategias para solucionarlo
  • No actúan como un modelo de “dominio”, capaz de realizar la tarea a la primera y sin errores

CONTENIDO DE LAS AUTOINSTRUCCIONES

 

  • Definición del problema: “¿Qué es lo que tengo que hacer?”
  • Estructurar la aproximación al problema: Considerar todas las posibilidades
  • Focalizar la atención: “Tengo que centrar mi atención y pensar sólo en esto. Tengo que hacerlo muy bien”
  • Elegir la respuesta: “Yo creo que es ésta”
  • Autoevaluación: “¿He conseguido realizar la tarea? ¿He logrado lo que me proponía?
  • Autorrefuerzo de la ejecución correcta, o (si no se ha tenido éxito) rectificación de los errores o selección de otra estrategia.


PASOS DE LAS AUTOINSTRUCCIONES


  • La madre o padre realizan la tarea dándose instrucciones a sí mismos en voz alta.
  • La madre o padre guía la tarea del niño o la niña mediante instrucciones en voz alta
  • El/la niño/a realiza la tarea, mientras se guía a sí mismo/a en voz alta
  • El padre o la madre realizan la tarea mientras se susurran a sí mismos/as las instrucciones
  • El/la niño/a se susurra a sí mismo/a las instrucciones mientras realiza la tarea
  • El padre o la madre realizan la tarea en silencio, pero dando muestras de que utilizan autoinstrucciones: miran pensativos las alternativas, comparan señalando una y otra,…
  • El/la niño/a realiza la tarea utilizando las autoinstrucciones encubiertas.